El paisaje
¡Qué suerte poder decirlo!
Toda la vida me cabe en esta pequeña gota de un apacible paisaje.
Mira ese trozo de cielo:
Ese es el cielo de todos, dónde el viento juguetea con mi pena y tu alegría , contoneando las almas un día tras otro. ¡Qué suerte que para todos haya un pedazo de cielo!
¡ Qué suerte poder tocarlo!.
Mira ese campo de sueños:
Ese es el campo del mundo, que caprichoso nos toma de la mano, salpicando nuestros sentimientos de colores y aromas diferentes, ¡Qué suerte que para todos haya un pedazo de campo!
¡ Qué suerte poder mirarlo!
Mira esa hermosa cabaña:
Compañera… esa eres tú. Porque en mi hermoso paseo por el campo de la vida, cuando me encuentro contigo en mitad de algún camino, es como llegar a casa. ¡Qué suerte llegar a casa!
¡ Qué suerte haberte encontrado!
¡Amiga, qué suerte tengo!.