El poder de utilizar el arte gráfico como herramienta complementaria a la poesía
La poesía en sí misma ya es una forma de comunicar muy poderosa, pero y ¿si acompañamos esos versos con un buen diseño gráfico? El poema habla en su lenguaje, la imagen conversa en el suyo, pero cuando se juntan bailan una danza mágica e hipnótica que nos envuelve en ese idioma único.
Plasmar con imágenes lo que encontramos escrito en un verso, es un reto de los más apasionantes que se le puede presentar a un artista.
Análisis de un poema visual.
Si observamos un poema visual nos detenemos en analizar una serie de funcionalidades como la disposición de la tipografía , el uso del color o no, la inclusión de diseño gráfico, fotografías, dibujos, composiciones y otros elementos plásticos que pueden hacer en su conjunto una obra que comunica con todos sus elementos. Una fusión de contenidos armónicos donde nada es casual sino causal. Todo se engloba en un contexto visual dónde hablan las palabras sin necesidad de hablar.
Poesía + diseño gráfico + Yo = Flechazo absoluto
Implementar el sentido visual a un género narrativo me produce desde siempre una cierta fascinación. El arte de plasmar imágenes concretas teniendo las las letras como hilo conductor, me ofrece un abanico más amplio e intenso a la hora de expresarme y transmitir. Elevar la potencia del diseño gráfico visual a su máximo exponente y fusionarlo con la poesía da como resultado una canción. Esta melodía es interpretada con otros instrumentos, dando lugar a sonidos nuevos y originales .
Me resulta imprescindible recurrir a la poesía antes de diseñar o conceptualizar un proyecto. Casi siempre antes escribo y verbalizo sentimientos, sensaciones. Para mi es como una reconfortable y necesaria pausa ante tanta incidencia visual. Entrelazar, unir, escuchar a la palabra, a la imagen, y finalmente con tiempo y respeto empezar a crear. Aquí se dan la mano el diseño gráfico y la poesía, se funden, se escuchan, se entienden y se dejan hablar.
Cuadros inspirados en libros, arte urbano que se basa en literatura y poesía visual, una forma de experimentar, donde el arte plástico prevalece sobre las letras (o viceversa), adquiriendo resultados tan singulares como infinitos.
La poesía visual es juguetona, curiosa, inquieta y creativa. Una intimidad inquietante entre lo visual y las letras en el que ambas se solapan una a la otra hasta dar lugar a un resultado impactante, intimista, rebelde y casi siempre reivindicativo.
A continuación os invito a perderos un instante por lugares plagados de poesía visual, no sólo orientada al diseño gráfico y la publicidad, dónde se utiliza muy frecuentemente, sino en otros contextos, otros recipientes y otros contenedores.
David Pérez Pol, tiene una obra como para perderse en ella. ¡Muy recomendable!.
Edu Barbero, ¡Me encanta su trabajo!
Un artículo muy interesante de Foroalfa Poema Visual: Diseño o poesía